Tenemos muchos paradigmas mentales, y varios de ellos se reflejan en nuestra forma de actuar en la empresa. “Cambiar el chip” parecería fácil, pero nuestro sistema inmunológico anti-cambio nos dirige obligatoriamente al pensamiento y conocimiento con el que nos sentimos cómodos. Esto afecta normalmente la actitud frente a lo distinto, y los mecanismos de defensa de la mente actúan instantáneamente: ESQUE-zofrenia, LLORO-adicción y NEGACIÓN. Todos mecanismos recurrente debido a la dificultad de alcanzar logros sin ni siquiera tener la voluntad personal de hacerlo.

Estas reacciones paralizan, nos congelan en el pasado, limitan y ciegan. Primer paso para la cura, darse cuenta. Luego, comenzar de a poco (de ser el caso) a acostumbrar al cerebro a pequeñas variaciones de pensamiento, es lo que llamamos ejercicios mentales. Y, Por último, tener siempre ese ánimo decidido lleno de fe y alegría para transformar nuestra vida; y la de los que están dentro de la organización dependiendo de nosotros, actuando a través del ejemplo y deseando un futuro mejor.

 

Diego Ignacio Montenegro

Diego Ignacio Montenegro

No siempre estuve involucrado con el marketing y la gestión. Realmente podríamos decir que fue un proceso de “descubrimiento”, de “iluminación forzada”. Si debo hacer una auto-presentación, tendría que recurrir a un esfuerzo separado por zonas temporales o épocas que tienen una amplia relación con los ciclos de mi vida. El ejercicio debería ser simple (o vamos a tratar de hacerlo!) y necesariamente debe quedar incompleto. El llenar esos espacios dependerá de cada uno de los lectores, críticos, argumentadores y consejeros de DiegoIgnacioMontenegro.com, que más que un blog de marketing trata de ser una experiencia en “las entrañas empresariales”, en todos aquellos elementos profundos de cambio que estamos experimentando.